Cómo hacer un proyecto: cuestiones clave a tener en cuenta
Poner en marcha un proyecto no es una labor demasiado difícil. Lo complejo de todo este proceso es hacer el proyecto, diseñarlo desde cero y que no se te olvide o pases de largo ningún elemento clave para su exitoso desarrollo.
Es normal tener dudas sobre cómo hacer un proyecto, en especial cuando no se cuenta con la suficiente experiencia o cuando el proyecto que se desea realizar es demasiado complejo. Por eso, aquí te ofrecemos las claves para que tu proyecto sea todo un éxito.
10 cuestiones clave sobre cómo hacer un proyecto
Lo primero que debes hacer antes de comenzar a redactar tu proyecto, es tener bien claro en qué va a consistir tu proyecto. Tener una idea clara de lo que se quiere hacer y conseguir es la base de un proyecto exitoso.
¿Ya tienes la idea básica de tu proyecto? Pues coge lápiz y papel y comienza a dar respuesta a estas cuestiones claves. ¡Ha llegado el momento de plasmar todas tus ideas y comprobar que no se te olvida nada!
- ¿Qué quieres hacer? Es el momento de definir tu proyecto y resumirlo en unas pocas palabras. Describe qué tipo de proyecto es y la idea básica en la que te basas.
- ¿Por qué quieres hacerlo? Todo proyecto se diseña por un motivo concreto, para mejorar algo o para cubrir una necesidad. Este es el momento de fundamentar la necesidad de tu proyecto y explicar por qué es necesario llevarlo a cabo.
- ¿Para qué quieres poner en marcha este proyecto? No es lo mismo el por qué que el para qué. Una cuestión nos dice la necesidad a cubrir, la otra, los objetivos que deseamos alcanzar con la puesta en marcha de este proyecto. Puede que tu objetivo sea mejorar las infraestructuras de una ciudad o favorecer el desarrollo cultural de un barrio. Aquí debes definir todos los objetivos, tanto generales como específicos, que desees alcanzar.
- ¿A quién va a ir dirigido? Conocer el público al que se destina tu proyecto también es importante. No es lo mismo que vaya dirigido a toda la población o a un grupo muy concreto de personas, con unas características y necesidades que debes conocer. Por ejemplo, no es lo mismo diseñar actividades educativas para niños que para adultos, o espacios de ocio para jóvenes que para personas con discapacidad. Necesitas conocer a fondo a esas personas para que tu proyecto sea realmente un éxito.
- ¿Cuándo lo vas a poner en marcha? Tener en mente una fecha concreta es necesario para una adecuada planificación. A veces los tiempos te vienen establecidos por el cliente o las bases de un concurso. Otras veces eres tú quien debe tomar esta decisión. En este caso, medita bien qué época es la más idónea para desarrollarlo y si tienes tiempo suficiente para planificarlo y ponerlo en marcha.
- ¿Durante cuánto tiempo? Los proyectos siempre tienen una duración determinada, puede ser un mes, seis meses o un año. En función de este tiempo, las acciones a desarrollar y los plazos variarán. Coge tu calendario y ponte a planificar cuándo se va a desarrollar cada acción y el tiempo que debería durar cada una de ellas.
- ¿Dónde se va a llevar a cabo? También es importante conocer el lugar exacto en el que se va a llevar a cabo el proyecto. No hablamos solo de la ciudad, también del emplazamiento. De esta forma, sabrás si vas a disponer o no de determinados recursos y podrás hacer una planificación más concreta y eficaz.
- ¿Cómo se va a desarrollar? Es el momento clave, la hora de pensar las fases en las que se compone tu proyecto y las acciones a llevar a cabo y la metodología que vas a utilizar en cada caso.
- ¿Quién lo va a ejecutar? Piensa qué personas de tu equipo son las más cualificadas para llevarlo a cabo, o si necesitas contratar a otros profesionales que se encarguen del desarrollo total o parcial del proyecto. A veces un equipo multiprofesional es la mejor solución.
- ¿Qué recursos necesitas para su correcto desarrollo? Por último, por no por ello menos importante, necesitas pensar en los recursos económicos y materiales que vas a necesitar para su correcto desarrollo. Tu proyecto no puede fallar por una falta de previsión de materiales o porque no ha sido bien presupuestado.
¿Has dado respuesta a todas estas cuestiones? Pues ya tienes todas las claves sobre cómo hacer un proyecto de éxito. Ahora te queda repasar por última vez todas estas cuestiones, para comprobar que no te falta nada, y comenzar con la siguiente etapa de tu proyecto: su puesta en marcha.