¿Qué tipos de logística estratégica existen?
Hablar de logística estratégica podría ser una redundancia, pues esta labor en sí misma ya requiere una coordinación y planificación entre varias dependencias, áreas o grupos productivos al interior de un negocio y fuera de él. Sin embargo, hay un matiz que valdría la pena tener en cuenta. ¿De qué estamos hablando?
¿Logística a secas o logística estratégica?
La logística estratégica es aquella que supone la coordinación de distintas acciones y el aprovechamiento máximo de los recursos con los que cuenta una empresa para el desarrollo de sus procesos, integrando de este modo a las distintas dependencias que la componen.
Su objetivo es optimizar la entrega y distribución de los productos. Sin embargo, muchas empresas aún no entienden esta labor como un proceso estratégico y, peor aún, la relegan a un segundo plano. Olvidan que es un elemento fundamental para su actividad comercial, como es el caso de las compañías caracterizadas por un alto volumen de producción.
O dicho de otro modo: aunque suene demasiado obvio, la logística estratégica es un proceso que marca la diferencia. Hay logísticas que no lo son, y quizá debido a ello es que podríamos empezar a hacer un análisis de los fallos en su cadena de suministro.
Logística estratégica: ¿qué pasa con los agentes externos?
Ahora bien, la logística estratégica también tiene que ver con la logística como tal, sobre todo cuando relaciona a terceros agentes que indirectamente se relacionan con el negocio.
Nos referimos, por ejemplo, a los distribuidores de insumos o materias primas, a los consultores a los que puedas contratar en determinados momentos del proceso o a distribuidores que hacen posible que tus productos lleguen a manos de los clientes.
¿Qué tipos de logística estratégica conoces?
Habiendo dejado claro lo anterior, lo siguiente que debes hacer es echar un vistazo a los tipos de logística estratégica que existen en los mercados, advirtiendo, eso sí, que no son, en ningún caso, camisas de fuerza ni modelos que se puedan aplicar en todos los mercados. Existen muchos más, pero en este caso hemos querido resaltar tres de ellos:
- Logística estratégica intensiva:
Este primer tipo de logística estratégica se emplea para productos o marcas con una distribución masiva y que gozan de un alto nivel de penetración en los mercados. Se apoya en la mayor cantidad de canales de distribución, pues considera que cuanta mayor sea su presencia en un escenario comercial, mayores beneficios obtendrá.
- Logística estratégica selectiva:
Este modelo te exige ser especialmente cuidadoso con los intermediarios que has de elegir para la distribución de los artículos o productos. Deberás tener claro cuántos serán en total, quiénes y hasta qué punto son compatibles con elementos como el tipo de transporte, la red de competencia, el mercado o el target.
- Logística estratégica exclusiva:
Es todo lo contrario a la logística intensiva. En este caso, la distribución propia de un artículo o producto se limita a los puntos de venta ya establecidos por la marca. El ejemplo más extendido de este tipo de modelo son las franquicias, negocios que guardan uniformidad y coherencia en todos sus locales.
¿Te queda claro ahora por qué no basta con hablar de logística en términos genéricos sino que, además, es necesario dejar claro que se trata de logística estratégica? Pues bien, ya puedes empezar a implementar el modelo que mejor le venga a tu negocio.