¿A qué se dedica un gestor de fondos?

Uno de los cargos menos conocidos del terreno financiero, pero no por ello el menos importante, es el gestor de fondos. A este tipo de profesionales acuden cada vez más empresas y negocios con aspiraciones y proyectos financieros. ¿Cuál es la razón de ello?

¿Conoces las funciones principales de un gestor de fondos?

Si el gestor de fondos no es un profesional de renombre es simplemente por una cuestión de publicidad y no porque sus labores no sean importantes para el global de las empresas. Todo lo contrario, su presencia en ellas constituye un valor fundamental.

Se recurre a este tipo de personas cuando una empresa o un cliente particular quieren revalorizar el capital destinado a un proyecto en concreto y cumplir los objetivos que se trazaron al inicio del mismo. Es decir, en este sentido ofician como asesores o incluso como consultores en momentos y ejercicios contables específicos.

El gestor de fondos no solo actúa a nombre personal. También lo hace representando a gestoras especializadas en este tipo de actividades, que ofrecen sus servicios a clientes de determinados entornos financieros. Otras de sus funciones son:

• Ayudan a los directivos o gerentes de empresa a tomar las decisiones adecuadas sobre inversión de capitales. Analizan el momento, las opciones de éxito de cada empresa y la perdurabilidad de dichas inversiones. En lo que se refiere a este aspecto, existen básicamente dos alternativas: centrarse en las inversiones que previsiblemente generen más renta o, por el contrario, optar por aquellas infravaloradas pero con altas probabilidades de recuperar su valía.
• También debe informar sobre las políticas de riesgos de la inversión, los derechos y obligaciones del cliente en lo que respecta a sus inversiones y la cuantificación de posiciones.
• Realizan radiografías detalladas sobre la situación financiera de clientes a los que quieren ayudar con sus proyectos, sobre todo si el estado actual de las mismas no es el mejor. El objetivo es que las potenciales inversiones sirvan para financiar el crecimiento y mejorar las condiciones del negocio.
• Lleva a cabo labores de seguimiento tan pronto se ha decidido dónde invertir. El gestor de fondos habla periódicamente con los responsables de las empresas y evalúa la estrategia de implementación por si fuesen necesaria la implementación de soluciones o adaptar el plan inicial de inversión. En algunos casos, se reúne incluso con los socios financieros de la empresa.
• Informa sobre las políticas de traspasos entre fondos de inversión y otros agentes que interactúen en los mercados, así como de los ajustes en cuenta que se derivan de operaciones financieras de valores que afectan de forma directa o indirecta al desempeño y la rentabilidad de los clientes que asesoran.
• Debe velar en todo momento por los intereses de los clientes, por lo cual tiene que ceñirse a una amplia normativa que deja claras las pautas de su conducta profesional. La confidencialidad y la transparencia son dos principios consustanciales a su acción financiera.

Cuando hablamos de gestoras de fondos, esta figura no debe confundirse con la de los bancos o entidades crediticias. La principal diferencia entre unas y otros consiste en que, en el primer caso, el dinero sigue estando en poder de los clientes y solo de forma eventual las gestoras (o una empresa asociada pero independiente) se hace cargo de él.