Macroentorno y microentorno: análisis para un DAFO
Macroentorno y microentorno son dos variables que hay que tener en cuenta a la hora de desarrollar cualquier estrategia de marketing en la empresa.
Una de las herramientas en las que macroentorno y microentorno cobran mayor protagonismo es en el DAFO. En un post anterior hablamos acerca de él y de su importancia a la hora de aplicar a distintas estrategias los resultados obtenidos gracias a él. Ahora iremos un paso más allá y analizaremos las ventajas y perjuicios que pueden aportar macroentorno y microentorno cuando se trata de diseñar una estrategia de marketing.
Macroentorno y microentorno positivos: oportunidades y fortalezas
En primer lugar, veremos aquellos aspectos de macroentorno y microentorno que pueden aprovecharse a favor del diseño de una estrategia de marketing:
- Las oportunidades son todos aquellos aspectos positivos que proceden del entorno. La coyuntura económica favorable, la situación política del país cuando concuerda con los valores de la empresa o el mayor poder adquisitivo del público objetivo son algunos ejemplos de ello.
- Las fortalezas son todos aquellos aspectos positivos que proceden de la propia empresa. La buena proyección económica de la empresa, su apertura de nuevas oficinas o el buen posicionamiento de la marca en el mercado son algunos ejemplos de ello.
Ahora bien, al analizar las oportunidades es importante distinguir entre aquellas que proceden del macroentorno como las que proceden del microentorno:
- Las que proceden del macroentorno no afectan exclusivamente a la empresa, sino a toda la sociedad, como puede ser la situación económica actual del país.
- Las que proceden del microentorno afectan exclusivamente a la empresa o, como mucho, a su sector del mercado, como puede ocurrir con el público objetivo que comparte con la competencia.
¿Qué debemos tener en cuenta respecto a macroentorno y microentorno positivos a la hora de realizar un DAFO?
- Tenemos el control sobre todo lo que afecte al microentorno más próximo, pero en lo relativo al macroentorno no podemos influir en él (a no ser que seamos una multinacional que mueva millones de euros al mes).
- Dado que no podemos influir en el macroentorno, es recomendable estar al corriente del mismo y aprovechar todas las oportunidades que ofrezca. Para ello, disponer de profesionales que estén al corriente de los distintos sectores que pueden impactar en nuestra empresa es altamente recomendable.
- Las oportunidades pueden transformarse en fortalezas si sabemos utilizarlas de la forma correcta.
Macroentorno y microentorno negativos: amenazas y debilidades
Del mismo modo que existen macroentorno y microentorno positivos, también los hay negativos:
- Las amenazas son todos aquellos aspectos negativos que proceden del entorno. Por ejemplo, una crisis económica.
- Las debilidades son todos aquellos aspectos negativos que proceden de la propia empresa. Por ejemplo, poca liquidez.
Del mismo modo que ocurría con las oportunidades y con las fortalezas, también debemos distinguir entre las amenazas que proceden del macroentorno y de las que proceden del microentorno.
Una vez tenido esto en cuenta, podemos proceder con el correspondiente análisis teniendo en cuenta que:
- Al igual que ocurría con los aspectos positivos, tampoco tenemos el control del macroentorno que nos afecte negativamente.
- Es por lo anterior que debemos estar alerta ante cualquier circunstancia que surja y anticiparnos a ella para evitar que provoque estragos en la empresa.
- En este sentido, el DAFO es una herramienta excelente al permitirnos relacionar las amenazas y las debilidades con las oportunidades y las fortalezas, de modo que podamos aprovechar estas dos últimas para contrarrestar los efectos negativos de las dos primeras.
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