Vulnerabilidad informática: por qué se produce
Vulnerabilidad informática es un término de ciberseguridad que se refiere a un defecto en un sistema que podría dejarlo desprotegido ante los atacantes. Bajo el mismo nombre también se engloba cualquier tipo de debilidad presente en un ordenador o en un conjunto de procedimientos que permita que la seguridad de la información esté expuesta a una amenaza.
Los usuarios de ordenadores tienen una forma de proteger sus equipos y dispositivos de vulnerabilidades: actualizando regularmente los parches de seguridad del software.
Estos parches son capaces de resolver fallas o agujeros de seguridad encontrados en la versión inicial y, por ese motivo, es importante mantenerse informados sobre las vulnerabilidades actuales en el software que utilizan y buscar formas de protegerse contra ellas.
Vulnerabilidad informática: los fallos más comunes
Las vulnerabilidades informáticas más comunes incluyen:
- Contraseñas débiles.
- Software que ya está infectado con virus.
- Bugs.
- Falta de cifrado de datos.
- Falta de autorización.
- Redireccionamiento de URL a sitios no confiables.
- Falta de autenticación para una función crítica.
- Carga sin restricciones de tipos de archivos peligrosos y descarga de códigos sin controles de integridad.
- Dependencia de entradas no confiables en una decisión de seguridad.
- Cross-site scripting y falsificación.
Causas y consecuencias de las vulnerabilidades informáticas
Una vulnerabilidad informática puede producirse porque los programadores no entienden completamente los programas internos. Al diseñar y programar, los programadores no tienen en cuenta todos los aspectos de los sistemas informáticos y esto causa una vulnerabilidad. Algunos programadores programan de forma insegura e incorrecta, lo que empeora la vulnerabilidad del sistema informático.
El daño de las vulnerabilidades informáticas se puede materializar de formas muy distintas, como:
- La divulgación de datos confidenciales.
- La propagación de virus.
- La intrusión de piratas informáticos.
Todas ellas pueden causar un gran daño a las empresas y usuarios individuales al provocar grandes pérdidas económicas. Con la mejora constante del grado de sofisticación de los atacantes, cualquier vulnerabilidad informática puede convertirse en una amenaza de graves consecuencias.
En concreto, el tipo de daño que pueden causar se clasifica en función de los tipos de valores del sistema afectados, que pueden ser cinco:
- Confiabilidad: se refiere a la reducción de falsas alarmas incorrectas en el funcionamiento de un sistema informático y la mejora de la eficiencia del mismo.
- Confidencialidad: tiene que ver con la protección de la información de los usuarios de la divulgación y la obtención por parte de un tercero no autorizado.
- Integridad: esta seguridad del sistema requiere que la información o los programas no se falsifiquen, manipulen, eliminen o inserten deliberadamente en el proceso de almacenamiento, operación y comunicación. En otras palabras, que no se pierdan ni destruyan.
- Usabilidad: está relacionada con la facilidad con que los usuarios pueden disfrutar de los servicios ofrecidos por ordenadores, dispositivos y redes de información.
- Incuestionabilidad: esta seguridad se refiere a garantizar que los actores de la información sean responsables de su comportamiento.
La seguridad de los endpoints es un enfoque centralizado que se ocupa de la protección de todos los puntos finales conectados a la red de TI corporativa (ordenadores de escritorio, ordenadores portátiles, servidores, teléfonos inteligentes y varios otros dispositivos IoT) frente a las amenazas informáticas.
La vulnerabilidad informática disminuye a medida que aumenta la eficacia de la estrategia de protección de los endpoints, que puede firewall, antivirus y otros software de seguridad.