Marketing 3.0: El Marketing de los Valores

Ya no cabe duda de que la era que estamos viviendo, con una población hiperconectada,  es lo más parecido a un “torbellino”, un remolino que avanza y se va modificando a sí mismo, en su recorrido.

El cruce entre tanta gente interactuando y las nuevas cosas que van saliendo (apps, servicios y productos, como consecuencia de la innovación) van modificando hábitos, comportamientos e intereses a una velocidad que sólo puede ser observada mientras sucede, porque “la foto” de ayer, no sirve para proyectar el mañana dado que todo cambió, otra vez.

Estuvimos casi 40 años aprendiendo cómo hacer Marketing 1.0,centrado en el producto y dirigido a consumidores con necesidades físicas.

En los últimos 10 años, todo pasó a ser 2.0, los negocios, las empresas, el marketing y la comunicación. El foco se puso en el Cliente y sus necesidades particulares (segmentación)  y en las TIC’s. El objetivo era conseguir y retener clientes/audiencia target. Y hacia ahí se apuntaron (se siguen apuntando) todos los esfuerzos de marketing. Entendimos que el insumo para atraer era el contenido que informara, interesara, resolviera problemas y entretuviese a nuestra audiencia.

Así, cuando  los medios de comunicación social (las redes) comenzaron a madurar alrededor de 2012, se empezó a invertir fuertemente en marketing de contenido (contenido Marketing 2.0) para atraer a la audiencia target y conseguir clientes, usuarios, seguidores. Gran parte del Marketing se centró en generar interacción a través de blogs, infografías, fotos y videos.

El contenido 2.0, intentaba conectar los productos y servicios de la empresa con los intereses del público target ofreciendo consejos, tips, características, ventajas y hasta historias de las experiencias de los consumidores con los productos y servicios de la marca.

Pero la sobreabundancia de mensajes e información ha convertido al marketing de contenidos 2.0 en una táctica ineficiente: la gente no está interesada en su día a día en conocer más sobre la empresa y sus productos. Si necesita algo lo busca puntualmente y encuentra cientos de respuestas, publicadas por otros usuarios.

Entonces, ¿cómo hacen las organizaciones para atraer el interés de su público? Mostrando a la audiencia que, además de “vender”, también les interesa cuidar el planeta donde habitamos y el mundo (a las personas que lo habitamos).

Con las masas interconectadas planetariamente se ha hecho visible “la conciencia de futuro”. Ya no pensamos sólo en nosotros mismos y nuestro bienestar presente, sino que pensamos en el mundo/país que le vamos a dejar a nuestros hijos. Hoy las redes estaban al rojo vivo con los resultados de las elecciones en USA, porque ya sabemos que, en un mundo globalizado, lo que pasa en otros países, también nos afecta a nosotros en mayor o menor medida.

En estos pocos años, como nunca antes, ha surgido la preocupación ciudadana – compartida y debatida a través de las redes sociales - sobre el calentamiento global, las guerras y sus consecuencias (p.e. refugiados), la seguridad, el hambre en el mundo, el consumo de recursos naturales, la precarización del trabajo por el avance tecnológico o los avances científicos para la cura y prevención de enfermedades.

Estos son algunos de los temas que nos preocupan y nos interesan a los ciudadanos del mundo y sabemos que el esfuerzo ha de ser colectivo. Por eso esperamos hoy de las Organizaciones, que se involucren y que inviertan parte de sus ganancias en ayudar a solucionar estos temas críticos para la humanidad.

En este marco, el desafío de las empresas hoy es trabajar fuertemente en el Maketing 3.0 que se centra en los valores, en la sostenibilidad y dar muestras de estar haciendo algo para, construir un mundo mejor.

Producir contenido que combine su identidad de marca con los temas que interesan a su público no es tarea fácil, pero sí posible. El mejor ejemplo son los periódicos, que lejos de hablar de su “negocio o productos y servicios”, publican contenido que es relevante para sus lectores en el día a día.

En esta nueva era digital, el Marketing vuelve a ocupar su lugar estratégico dentro de la organización, asumiendo que no se trata de acciones solamente, sino que se trata de entender a sus públicos y sus necesidades, sean estas audiencias los clientes, los usuarios, los empleados, los proveedores o los accionistas. Y mostrar su interés y su accionar, en relación a los temas que preocupan y ocupan a cada una de esta audiencias generando ese contenido 3.0 (basado en valores) que a la vez que entretenido e interesante, sea informativo y educativo.