Errores en Project Management que revelan debilidades del Director de Proyecto
Los errores en Project Management terminan pagándose por todos. Por supuesto, el propio Director de Proyecto será el primero en sufrir las consecuencias del descrédito por sus malas decisiones o las acciones equivocadas que ha impulsado; sin embargo, la organización al competo, por su mala imagen y los equipos de trabajo, que han estado sometidos a una gestión tan nefasta también se ven gravemente afectados.
Los líderes, los Jefes de Proyectos brillantes, para muchos, nacen, no se hacen. Independientemente de si se comparte esta teoría o no, lo importante es que las ganas de mejorar pueden estar dentro de cualquier persona con la suficiente motivación y, ello incluye a los Project Managers. Y para transformarse en la versión más brillante de uno mismo, nada mejor que superar las debilidades.
Debilidades de un Director de proyecto que desembocan en errores en Project Management
Muchas veces, los peores errores en Project Management provienen de la manifestación de los puntos débiles de los Directores de Proyecto. Aunque sus consecuencias son complicadas de solucionar, al atisbar los primeros indicios de una actitud de este tipo, el propio Project Manager puede intentar moderarse, tomar aire y poner medidas que eviten tendencias tan perniciosas como las siguientes:
1. Incapacidad para delegar: muchos errores en Project Management están relacionados con las ganas de querer hacer todo uno mismo de su responsable. Este comportamiento encierra la frustración por no ser capaz de controlar todos los aspectos de un proyecto o actividad y es altamente perjudicial. Demuestra falta de confianza en los demás y puede hacer tambalearse la moral del equipo, además de conducir a un fracaso estrepitoso.
2. Falta de eficiencia en las reuniones: que puede ser debida a una pobre programación, a una mala elección de fecha, insuficiente o excesiva convocatoria o a una precaria organización durante el encuentro. Puede detectarse si va asociada a falta de puntualidad, dificultades para tratar todos los temas previstos o necesidad de extender su duración. Revela que el Project Manager comienza a estar desbordado por la responsabilidad y es un indicio de que comenzarán a proliferar los errores en Project Management.
3. Dificultades para mantener un comportamiento adecuado: malos modos, gritos, conversaciones subidas de tono o faltas de respeto, implícitas o explícitas, son pruebas de uno de los peores errores en Project Management. Un estilo de liderazgo así no está descrito en ningún manual y se asemeja más a un mandato absolutista que raya la tiranía. Además de no lograrse ningún efecto positivo con este tipo de actitudes, conducen a la pérdida de respeto del equipo y la vergüenza de la organización.
4. Habilidades comunicacionales insuficientes: la falta de comunicación está entre los errores de Project Management que, de forma más directa, provocan el fracaso de proyecto. Cuando el responsable de la gestión no es capaz de expresar lo que necesita, los equipos no pueden comprender el mensaje. Como resultado, la ejecución se resiente, impulsando una mayor frustración por parte del Director de Proyecto, que no puede saber con claridad si no se han comprendido los requisitos, si no se es capaz de cumplirlos o si no se tiene la voluntad de hacerlo. La mala comunicación genera un círculo vicioso que hiere de muerte al proyecto, al generar desconfianza, falta de credibilidad, mal ambiente laboral y falta de motivación. Rendimiento, productividad y resultados son los más afectados cuando esto sucede.