El checklist de la evaluación de riesgos: ¿donde están los enemigos?
Sea cual sea el proyecto al que te enfrentes, los riesgos que amenazan su proceso pueden surgir en cada momento del mismo. Muchos de los procesos que se dan a lo largo del proyecto son impredecibles, a pesar de los esfuerzos realizados por tenerlo todo controlado. La identificación de los riesgos es un trabajo de equipo que se realiza en varias dimensiones para localizar las combinaciones de problemas que pueden dar al traste con los objetivos del proyecto.
Descubre en esta lista de control las áreas más conflictivas de cualquier proyecto:
Alcance del proyecto
Tendrás que tener claras las características de los clientes, si el trabajo puede o no ser definido y si cambian los objeticos del proyecto.
Programa del proyecto
Asegúrate en este punto si tiempo de duración del proyecto puede haberse infraestimado. También si ha cambiado la fecha de finalización de alguna parte del proyecto y si la fecha final es real o no.
Anticípate a la posibilidad de que la aprobación del proyecto se retrase y a que la toma de decisiones no sea la causa de los retrasos.
Marketing
Uno de los riesgos a los que te puedes enfrentar es no estar a la altura de la expectación de los usuarios o no haber observado los cambios en los requerimientos del mercado.
También debes estar atento a que no se produzcan cambios en los objetivos de los precios y a los aumentos y bajadas del volumen de venta.
Material
Asegúrate que la fuente y posibilidad de conseguir recursos materiales es completamente fiable, que no existen problemas de existencia y que tus proveedores y los materiales son fiables y al precio acordado
Capacidades y equipamiento
Controla los riesgos que pudieran surgir debidos a la baja disponibilidad, la escasa confianza o la falta de flexibilidad que pudiera afectar al proyecto.
Recursos
Podría resultar negativo y un factor de riesgo los cambio en los miembros del equipo, las alteraciones en la financiación y los gastos no previstos.
Organización
Los aspectos que pueden producir riesgos en la organización están relacionados con los roles y responsabilidades no claras o poco definidas, la falta de delegación eficaz o la escasa relación entre los diferentes equipos implicados en el proyecto.
Una mala o mediocre coordinación también puede conducir al fracaso, así como la aparición de conflictos y la escasa gestión de la reorganización cuando se necesita. Vigilad con buenos planes de gestión de riesgos que estos problemas no se produzcan.
Personal.
Valora la posibilidad de que haya miembros del equipo que no estén presentes en alguna de las partes del proyecto por enfermedad, vacaciones o problemas de otro tipo.
Comprueba que el ambiente de trabajo es el adecuado para que no se produzcan distracciones del exterior y que no surjan conflictos de intereses.
Influencias externas.
En el plan de gestión de riesgos debes incluir todo lo relacionado con situaciones de desastres naturales que puedan darse y las posibles soluciones.
Refleja también las regulaciones gubernamentales y los temas de salud y seguridad que puedan afectar al proyecto.
Ten en cuenta los cambios en las tendencias económicas que puedan estar produciéndose y asegúrate de que la imagen de la compañía es buena.
La gestión del riesgo no significa eliminarlos todos, sino proponer una disciplina estructurada que alinea la estrategia, los procesos, las personas, la tecnología y el conocimiento con el propósito de administrar las incertidumbres a las que tenga que enfrentarse la empresa.