Carta de presentación para un trabajo: claves de redacción
La forma en que escribas la carta de presentación para un trabajo en un puesto de responsabilidad puede decidir tu futuro. ¿Quieres encontrar la posición de tus sueños en tu empresa ideal?
Cómo redactar la carta de presentación para un trabajo a nivel ejecutivo
En cualquier carta de presentación para un trabajo, los responsables de selección de la empresa quieren ver evidencias del éxito en los proyectos que se han gestionado o la cohesión de los equipos que se han liderado.
Teniendo esto en cuenta, el objetivo del candidato debe ser escribir una carta de presentación para un trabajo convincente. Algo que puede conseguirse si se siguen las siguientes recomendaciones:
- Destacar la experiencia de gestión y liderazgo, los logros alcanzados y mejores resultados obtenidos.
- En lugar de establecer una lista de tareas llevadas a cabo en puestos anteriores, es preferible compartir ejemplos específicos y cuantificables de logros.
- Aprovechar para introducir datos relevantes que no tengan cabida en el currículum.
- Referenciar un contacto de la red profesional que pueda resultar especialmente relevante para la posición a la que se aspira.
- Enfatizar los motivos por los que se está interesado en formar parte de la compañía.
Y, de la teoría a la práctica, al ponerse con la redacción de la carta de presentación para un trabajo se pueden plasmar todas estas ideas sobre el papel siguiendo una estructura como la que proponemos:
- Inicio. Abrir la carta con un saludo y, en el primer párrafo mencionar el trabajo específico que solicita y el origen del interés en trabajar para la compañía.
- Los siguientes párrafos de la carta de presentación para un trabajo a nivel ejecutivo pueden servir para explicar por qué se considera uno como candidato fuerte para el puesto. Es el momento de hablar de experiencia, habilidades y logros relevantes.
- La finalización de la carta puede emplearse para agradecer a la empresa por considerarlo para el puesto.
Una carta convincente mostrará por qué se es el candidato mejor cualificado para el puesto de gestión vacante. Merece la pena tomarse el tiempo necesario para hacer coincidir las calificaciones expuestas con los requisitos enumerados en la publicación del trabajo. De la misma forma, siempre resulta interesante estudiar a la compañía para poder hacerse una mejor idea de sus necesidades y objetivos, perspectiva que servirá para redactar una carta más persuasiva.
Como recomendaciones finales para redactar una carta de presentación para un trabajo, hay que evitar los errores gramaticales y de ortografía, acordarse de que no se trata de replicar el currículum y, sobre todo, no ser genérico. La personalización es, muchas veces, la clave que marca la diferencia entre dos candidatos.