EMBA, la mejor opción para una alta formación
De todas las opciones de máster MBA que circulan en el mercado académico, hay una que despierta especial interés: el máster EMBA, un enfoque orientado a directivos con más de 5 años de experiencia que buscan ampliar sus habilidades, talentos y conocimientos en la gestión de empresas y los negocios
Sin embargo, un número significativo de ellos no se atreve a dar y el paso y posterga su matrícula en programas formativos de este tipo. La razón es más o menos la misma: ¿sirve realmente un EMBA? ¿Puede complementar en algún aspecto la experiencia de años y los conocimientos adquiridos?
La respuesta que nosotros te damos es sencilla y concisa: sí, el contenido de un EMBA realmente supone un valor agregado para cualquier trayectoria y, por tanto, vale mucho la pena matricularse en un programa de este tipo. ¡A continuación te contamos por qué!
EMBA: su importancia en el contexto actual
La buena gestión empresarial y el rol eficaz que desempeñes en los negocios no solo dependen de la trayectoria. Sí, vale que es un factor importante y que en determinados momentos marca la diferencia entre, por ejemplo, un directivo de alto nivel y otro de menor envergadura. ¿Quién tiene duda de ello?
Sin embargo, no es el único elemento a tener en cuenta. Si bien es importante proyectar tu perfil profesional con la experiencia acumulada en tus años de ejercicio, también cuentan factores como la utilidad de los conocimientos adquiridos, la actualización de los mismos e incluso el desarrollo de nuevas competencias.
De hecho, si miras con detenimiento a tu alrededor, difícilmente verás a un CEO o a un alto directivo que se haya quedado anclado en la gestión previa a la era de las nuevas tecnologías y la digitalización. Si está allí es porque ha sabido adaptarse al contexto en el que ahora nos movemos. ¡Esa es la idea!
Esto es todavía más evidente si tenemos en cuenta que el mercado laboral actual corre a toda velocidad y no da tregua a quienes estén empeñados en cerrarse a estrategias o metodologías del pasado. Si quieres sobrevivir, mira hacia delante.
Contenidos básicos de un EMBA: alta formación
Obviamente, a un CEO o a un alto ejecutivo el contenido de un EMBA no le sonará del todo nuevo. De hecho, este tipo de programas parten de una serie de conocimientos previos para luego apuntar hacia áreas de profundización. Repasemos algunas:
Responsabilidad directiva y social:
Al un líder empresarial ya no solo se le pide responsabilidad en lo que se refiere a su cargo; también en cuanto el entorno donde opera. Esa es una de las diferencias más importantes entre el enfoque directivo actual y el de décadas pasadas.
Liderazgo 2.0:
Tampoco el liderazgo es el mismo que el de hace unos cuantos años. Los modelos, los estilos y las técnicas han variado considerablemente; es necesario estar al tanto de las nuevas tendencias en esta materia.
Visión estratégica:
La mirada estratégica, esa que nos permite tener una visión de los negocios más amplia que la de cualquier otro miembro de nuestra organización, también debe adaptarse a los nuevos modelos y las nuevas herramientas tecnológicas, que son las encargadas de dinamizar y agilizar los procesos empresariales.
Visión global:
Nunca antes como ahora, en plena globalización, es tan necesario abrir nuestras posibilidades a otros mercados y escenarios comerciales. El mundo ha reducido las distancias. Debes estar dispuesto a asomarte a sus numerosos beneficios.
Recuerda, hacer un EMBA no sólo es necesario para adquirir conocimientos sobre la gestión de empresas y los negocios; también lo es para actualizar los que hayas adquirido durante tu trayectoria profesional.