Camiones Autónomos, el futuro del transporte ya está entre nosotros
Durante muchos años el cine nos ha fascinado con los autos que se conducen solos, es decir, sin que una persona tenga el control del vehículo. La ficción ha alimentado a nuestra imaginación con vehículos de diferentes formas y materiales, los hay con y sin volante, en algunos se viaja de espaldas, en otros acostados en un suave asiento cama, pero en todos el factor común es que los integrantes viajan haciendo cualquier cosa, excepto conducir.
Para el 2014 aquella fantasía cinematográfica comenzó a salirse del mundo de los sueños y a materializarse por medio de un innovador vehículo autoconducido, que el mundo ha conocido como “El Auto de Google”. Mediante un software, el auto identificaba los distintos objetos que se encontraban alrededor de él (peatones, ciclistas, conos de seguridad y otros automóviles) y tomaba decisiones con respecto a la velocidad y las maniobras correctas que debía realizar en tiempo real. Este fue el primer paso.
En ese mismo año Dailmer presentaba su prototipo de camión semi-autónomo bajo el nombre de Mercedes-Benz Future Truck 2025. Si bien no es exactamente igual al vehículo de Google, esta idea supone que el conductor viaje más relajado al colocar lo que en los aviones se lo define como el “piloto automático”. Con el sistema Highway Pilot activado, el conductor gira su asiento 45 grados hacia la derecha convirtiendo su puesto de conducción en una posición de descanso o de trabajo para hacer otras actividades mediante una pantalla extraíble. Ante una situación de emergencia, el camión solicita la asistencia humana y el conductor toma el control del vehículo.
En el 2017, en Pferdsfeld, Alemania, fueron probados cuatro camiones Mercedes-Benz autónomos equipados con carrocerías barre nieves. En este caso, un sistema denominado platooning, controla una o varias unidades sin conductor que son monitoreadas por medio de GPS y la conectividad entre ellas, a un vehículo pilotado que circula delante. Tienen la capacidad de encender y apagar el motor, activar el freno de estacionamiento, doblar, acelerar y desacelerar, frenar, realizar cambios de marcha, bloquear y desbloquear el diferencial, encender las luces, entre otras funciones.
Volvo también está en la carrera de los self-driving truck. Brasil fue el escenario donde el VM Autónomo pasó la prueba y logró reducir un 4% las pérdidas causadas por los camiones actuales, que aplastan los brotes de caña y generan daños por hasta un 12% de la producción anual de caña de azúcar. El sistema consta de dos antenas GPS parte del sistema VDS (Volvo Dynamic Steering), dos giróscopos de alta sensibilidad y una pantalla colocada en la cabina del camión que trabaja como una interfaz hombre-máquina. El control lateral del camión es extremadamente preciso, justamente para que los neumáticos no pasen por encima de los brotes.
Por su parte, Tesla presentó el Semi, un camión completamente eléctrico que se destaca por el diseño, la mecánica y las prestaciones. Con la proyección de lanzamiento en serie para el 2019, el equipamiento del Semi incluye asistencias a la conducción y un sistema de piloto automático mejorado. Al igual que Volvo, también han desarrollado el concepto de convoy, es decir, un vehículo con conductor lidera una columna de camiones autónomos.
Es más que evidente que los vehículos y pelotones autónomos son los pilares de los futuros sistemas de transportes sustentables. Varias empresas más están en la carrera. Otro ejemplo es Scania, que circulará un pelotón de camiones autónomos en caminos públicos de Singapur mientras transporta contenedores entre las terminales del puerto.
Finalmente, como aspectos positivos de los camiones autónomos podemos destacar la optimización de costes, la reducción de las emisiones y un mayor margen de seguridad vial, de acuerdo con informes del Foro Internacional de Transporte (ITF). Cabe destacar que el 90% de los accidentes protagonizados por camiones han sido por errores humanos, según mencionan estos estudios. El lado negativo es la destrucción de puestos de trabajo y los problemas que tendrán aquellos transportistas que no puedan actualizarse a las nuevas tecnologías. El impacto será inevitable, el IFT advierte que más de cuatro millones de choferes podrían perder su trabajo hasta 2030, cuando se extienda el uso de los camiones autónomos. Por ello sugiere que la llegada de estos vehículos se realice en forma gradual y regulada por leyes que amparen al empleo del conductor.
Por lo tanto, si su empresa está en el mundo del transporte por carretera y la infraestructura de los países en donde actúa se lo permite, sería bueno comenzar a pensar en los Self-Driving Trucks.