El impacto no es solo en los patrones de consumo o bien, en la forma de trabajar sino también en la forma de aprender. Desde las primeras iniciativas del e-learning en la década de los 70, la industria ha tenido un rápido crecimiento y sin duda tendrá un papel protagónico en la forma de aprender del siglo XXI.
El mercado global del e-learning alcanza ya cifras por encima de los 100 mil millones de dólares y las proyecciones indican que se triplicará en el plazo de un lustro. Las proyecciones de crecimiento son para todas las regiones estudiadas: Europa, Norte América, Latinoamérica y Asia.
La comparación de la formación online con la formación tradicional nos sugiere que, efectivamente, la formación online puede estimular el crecimiento intelectual tanto como la formación tradicional. La experiencia universitaria, aunque diferente, es completa. Muchos de los componentes de la experiencia se pueden replicar perfectamente en un entorno virtual o incluso se pueden mejorar.
El autor afirma que “el e-learning tiene un gran impacto cuando se trata de los beneficios que hacen que la actividad educativa sea más fácil y sin complicaciones. La posibilidad de aprender desde donde sea y cuando sea; con una mejor relación coste-beneficio; en un entorno interactivo, tanto o más que en una formación presencial; desarrollando habilidades en el trabajo en equipos virtuales, una una destreza altamente apreciada en el mercado laboral actual y aprovechando la gran diversidad étnica y cultural que suele estar presente en los programas en línea.”
El Dr. Toro concluye que “la vocación de la formación online es hacer que el aprendizaje sea más eficaz y aportar indicadores que permitan medir sus resultados. El e-learning, a través de las herramientas informáticas, permiten crear en un entorno interactivo y un proceso estandarizado que facilita el análisis de métricas de resultados, no solo de forma longitudinal sino también de forma transversal. Este proceso de medición permite, a su vez, incidir sobre aquellas variables cognitivas que facilitan el aprendizaje. Algunas tendencias en el aprendizaje virtual pueden ofrecer pistas acerca de hacia dónde vamos en el campo de la formación online. Por ejemplo, la gamificación y el aprendizaje personalizado.
Es una época interesante para los que estamos implicados en el diseño e implementación de programas de formación online.”
DESCARGAR INFORME