Tipos de canales de comunicación: por qué ya no importan
En un futuro muy próximo no hará falta hablar de tipos de canales de comunicación, sino de mensajes y receptores. Las nuevas tendencias indican que el marketing móvil avanza hacia un modelo de comunicación bidireccional más efectiva que nunca antes, entre la marca y el consumidor.
Las empresas están en proceso ya de avanzar en el alcance de las comunicaciones, pero también en algo mucho más importante: la relevancia del mensaje. No obstante, la transición a este planteamiento se producirá de forma irregular, puesto que requiere reconsiderar completamente las estrategias de comunicación.
Por qué no hará falta pensar en tipos de canales de comunicación en el futuro
Los estrategas de marketing necesitarán abstraer su comunicación al mensaje que desean transmitir y a la persona o personas a los que se los desean enviar, evitando pensar en los tipos de canales de comunicación a través de los que se entregará.
El proceso a seguir se podría resumir en los siguientes pasos:
- En vez de plantearse que hace falta enviar un correo electrónico enviar a los clientes, se investigará acerca de la información que se precisa recoger para poder informarles adecuadamente.
- Se utilizará el análisis de datos para determinar si esa información se adecuaría mejor a un mensaje dentro de la aplicación o, en última instancia, a un correo electrónico.
- Se buscará la forma de adaptarse mejor al cliente individual, en el momento adecuado.
La importancia de este cambio de enfoque radica en el hecho de que las comunicaciones de marketing se dirigen a un cliente multicanal.
¿Por qué pensar en los tipos de canales de comunicación cuando el consumidor utiliza una variedad y no solo uno? Los clientes están utilizando más de un canal para interactuar y comunicarse con las marcas, por lo que no se debe asumir que solo hay una forma de llegar a ellos.
Los profesionales de marketing deberían preocuparse por que sus clientes escuchen lo que la marca tiene que decir, sin importar necesariamente cómo lo transmita. En el más simple de los términos, la buena comunicación, simplemente llega y es lógico que, si se envía la comunicación a través del canal que prefiere cada cliente individual y la hora del día en que usa ese canal, se obtendrán más respuestas y más participación. Esto significa aumentar el alcance y, lo que es más importante: impulsar la relevancia de la comunicación, al comunicarse con los clientes sobre las cosas que les interesan, en los canales que les gusta usar.
Obtener alcance sin preocuparse por la relevancia es una pérdida de tiempo que puede definirse con cuatro letras, spam. La entrega de mensajes que a los usuarios no les importan especialmente, en los canales que no usan, equivale a cometer el error de asumir que la comunicación implica enviar muchos mensajes, en lugar de asegurarse de que los mensajes se noten y aprecien. Esto no solo es un marketing ineficaz, sino que puede ser muy molesto y fomentar el desarrollo de actitudes negativas con respecto a la marca o la forma en que se comunica.
¿Sabías que el 80% de las marcas piensan que las comunicaciones de las marcas son útiles y relevantes, pero solo el 20% de los clientes está de acuerdo? ¿Sigues planteando tu estrategia de marketing en términos de tipos de canales de comunicación?