Startups: cuándo buscar la sostenibilidad
Uno de los mayores dilemas de los emprendedores una vez su startup ha tomado tracción es decidir cuándo frenar la inversión en crecimiento para buscar la sostenibilidad, en este post vamos a analizar esta disyuntiva tan importante en más detalle.
Las empresas recién creadas suelen no ser sostenibles: además de partir de unos costes de arranque, sus gastos fijos no se suelen compensar con los ingresos en etapas iniciales aun habiendo encontrado un modelo de negocio exitoso con encaje entre producto y mercado. La principal razón es que cuesta tiempo y dinero llegar al número suficiente de clientes que paguen los gastos mínimos. Además, esta situación se suele prolongar en el tiempo, ya que para obtener los clientes suficientes se requieren mayores inversiones (marketing, nuevos productos o desarrollos) que alejan aún más el punto de equilibrio.
De esta manera, se suele llegar a una situación en que los emprendedores se enfrentan a una difícil decisión: si frenan el crecimiento pueden llegar a la sostenibilidad ya que los ingresos recurrentes serían suficientes para pagar los costes operativos. El problema es que ese movimiento estancaría la empresa, por un lado permitiendo a competidores acercarse y por otro evitando entradas en nuevos mercados sectoriales o geográficos.
En este dilema toman un papel fundamental los financiadores de la startup, en general rondas de capital que pueden buscar una salida para su inversión diferente de la preferida por el emprendedor: sostenibilidad inmediata para cobrar dividendo o mayor crecimiento buscando tamaño para una venta o salida a bolsa. Es por tanto importante estar alineado con los co-inversores para que cuando esta situación llegue se haya consensuado una dirección.