Hoy nace la innovación que cerrará la empresa en la que estás trabajando
Esta contundente frase, que encabeza este post, se me ocurrió a raíz de la noticia del cierre de la revista PCActual, considerada un referente en temas de informática y tecnología, que llegó a ser la segunda revista de informática de mayor difusión en Latinoamérica y que precisamente este año celebraba sus 25 años de existencia. Es otra víctima más de la extinción de las revistas informáticas en papel provocada por las mismas tecnologías que ellas vieron nacer y de las que fueron publicando artículos desde su bautizo hasta su mayoría de edad, sin ser conscientes que eran los enterradores que incluso serian el medio en el que publicarían su esquela (la noticia del cierre los mismos empleados la colgaron en twitter).
Este es un caso más en la historia de la innovación. Una historia en la que empresas que llegan a ser líderes de su sector, al cabo de unos años desaparecen por no haber sido capaces de detectar a su potencial destructor, hacerle un seguimiento a distancia y cuando viesen que no podían ganar la batalla entonces empezar los preparativos para cambiar de sector. Es la aparición de innovaciones disruptivas lo que sistemáticamente ha provocado el cierre de empresas “de toda la vida” y de todo tipo de tamaño, o el cierre de aquellos centros productivos y líneas de negocio que habían quedado obsoletos.
Todos ellos han sucumbido frente a la aparición de “nuevas tecnologías” que no existían en su época de esplendor. Los ejemplos son innumerables, y por citar algunos:
- Kodak y AgfaPhoto, que en su momento fueron líderes en el mercado de la fotografía analógica, y fueron desplazadas por la tecnología de la fotografía digital.
- Tecniimagen, el último fabricante español de televisores de tubo catódico, que cerró a causa del apogeo de los televisores de LCD y de plasma.
- La Enciclopedia Británica, que tuvo que cerrar la edición en papel tras… ¡244 años! para quedarse como un producto digital.
- El cierre en la India, este mes de julio, del Servicio Público de Telegramas que llevaba 163 años funcionando.
- Blockbuster, que cerró por la competencia de otras empresas que apostaron por nuevas tecnologías y nuevos modelos de negocio.
- Disney, que cerró la línea de animación 2D tradicional para centrarse en la animación 2D y 3D digital.
Estos ejemplos me permiten recomendar que las empresas deberían tener un sistema de vigilancia tecnológica que las mantenga informadas de aquellas tecnologías que podrían ser potencialmente peligrosas para su continuidad o de las que ya son un peligro (y no las hemos detectado antes).
Veamos algunos ejemplos de “peligros potenciales” que algunas empresas deberían considerar:
- La tecnología de las impresoras3D y los recambios. Es posible que en un futuro no muy lejano, cuando se estropee una pieza de un electrodoméstico, en vez de ir a comprar el recambio vayamos a “imprimir el recambio”. Ello podría suponer que las tiendas de recambios sufriesen una importante reconversión.
- Las tecnologías de reconocimiento de voz (como Siri o en Google Chrome) y los teclados. Es probable que dentro de algunos años el teclado pase a ser pieza de museo como los discos flexibles o las impresoras matriciales de impacto.
- Los juegos en la nube y las consolas. Ya se está hablando sobre la desaparición de las consolas como la PSX, la Wii o la Xbox, que podrían pasar a ser sustituidas por servidores en la red, que actuarían como mega-consolas y a las que se accedería desde cualquier dispositivo.
Todos estos ejemplos son hipótesis que podrían ser una realidad (o no), pero dado que el impacto sobre las empresas que podrían verse afectadas no es desdeñable, sí que sería oportuno mantenerlas bajo vigilancia.
Una vez la empresa es consciente del peligro puede actuar de dos formas: o bien como el capitán Edward John Smith y no hacer caso de las advertencias, o bien cambiar de rumbo y salvar la nave. Sin embargo, nosotros también debemos tener nuestro sistema de vigilancia, porque hemos de ser conscientes de que lo que le puede ocurrir a nuestra empresa, también nos puede ocurrir a nosotros y en ese caso deberíamos tener presente esta frase:
Hoy nace la innovación que te dejará en el paro… si no haces nada para remediarlo.