El marco lógico en la gestión de un proyecto, una herramienta esencial

El marco lógico es una herramienta que permite estructurar los procesos esenciales de un proyecto (conceptualización, diseño, seguimiento de la ejecución y evaluación), profundizando en los vínculos entre cada acción y sus resultados. El marco lógico puede resultar de gran ayuda cuando una organización considera que los elevados recursos dedicados a un proyecto concreto no están proporcionando resultados por falta de planificación en cuanto a la clarificación de medios empleados y fines buscados. Prevé acontecimientos que pueden ocurrir con un grado de probabilidad razonable y define las acciones para enfrentarse a los riesgos.

¿Qué mejoras se producen por la aplicación del marco lógico?

Sirve de gran ayuda para:

• Clarificar los objetivos y la justificación del proyecto.
• Localizar las necesidades de información.
• Definir los elementos clave del proyecto.
• Analizar desde el comienzo el entorno del proyecto.
• Facilitar la comunicación entre las partes implicadas.
• Establecer los criterios de éxito.

El marco lógico paso a paso

Para aplicar la metodología de marco lógico en un proyecto tienes que tener en cuenta los siguientes puntos:

• Análisis de la situación.
  • Análisis de los participantes. Identificarás los intereses y las expectativas de todas las organizaciones, empresas, grupos o individuos que van a colaborar.
  • Lo más lógico es que no todos los intereses sean coincidentes, por lo que necesitas prever donde pueden surgir los intereses opuestos – que probablemente serán fuente de conflictos - y buscar alternativas para llegar a acuerdos en esos casos.
  • Análisis de los problemas. Debes identificar los problemas y sus relaciones causales mediante un árbol del problema (se representan de forma gráfica los problemas, sus causas y sus efectos y cómo se relacionan entre si).
  • Análisis de los objetivos. Una vez dibujado tu árbol de problemas, debes transformarlo en un árbol de objetivos (futuras soluciones) para poder analizar cada una de ellas.
  • Análisis de las alternativas. El último paso a realizar consiste en analizar y valorar las opciones de solución y la posibilidad de llevarlas a cabo y determinar la estrategia del proyecto.
  • Diseño del proyecto.
    • Elementos del proyecto. Una vez que has decidido una estrategia concreta, siguiendo los pasos anteriores, debes resumir los principales elementos del proyecto surgidos del árbol de objetivos. Estos tendrán que ver con tu objetivo global, tus objetivos específicos, los resultados que pretendes conseguir, las actividades o tareas que tendrás que realizar para llegar a ellos y los recursos que necesitarás para realizarlas.
    • Establecer prioridades. La visión global que alcanzas con esta metodología te ayuda a establecer prioridades dentro de la gestión diaria, enfocadas siempre a conseguir el objetivo final marcado dentro de tu estrategia.
    • Factores externos. Tendrás que analizar los factores que se escapan a tu control directo dentro del proyecto. Como escapan a tu control, no deberás emplear esfuerzos en solucionarlos, ya que no podrás. Simplemente tendrás que tener en cuenta su impacto en aquellos ámbitos que sí controlas para minimizar lo más posible sus consecuencias negativas y aprovechar sus ventajas.
    • Indicadores. Para conocer el estado real de tu proyecto, debes medir hasta qué grado se han logrado los objetivos en las distintas fases.

    ¿Cuándo utilizar el marco lógico?

    Te interesa utilizar esta metodología en grandes proyectos en los que cuentas con un equipo amplio, porque te ayuda a organizarlo mejor y a evitar desviaciones sobre la planificación inicial prevista. También es útil en proyectos experimentales que requieren de un análisis más detallado y en programas que consisten en varios proyectos.