El futuro se ha vuelto realidad: Camiones autónomos
Desde hace años, varias compañías llevan trabajando en vehículos autónomos, enfocándose también en el transporte de mercancías. Estos vehículos ya dejaron de ser prototipos y se están utilizando para distribuir mercancía de pedidos reales. ¿No os parece increíble?.
Uber adquirió la startup Otto y continuó con el desarrollo de los vehículos autónomos, logrando hacer su primer pedido en 2016, que le sirvió como una gran campaña de marketing. Pero, tras dos años de continuo desarrollo, sienten preparados para empezar a usarlo en trabajos reales, integrándolo en el servicio Uber Freight, dedicado al transporte de mercancías (por ahora sólo en US).
En esta primera etapa, los conductores humanos no están descartados, ya que deben realizar tareas que los sistemas autónomos no son capaces de realizar actualmente. Este sería el proceso habitual:
- Un empleado humano recoge la carga del usuario y la lleva a un centro de reparto, donde se sube la misma al camión autónomo.
- El camión autónomo realiza la mayor parte del viaje, llevándola a un centro de reparto.
- Un empleado termina el viaje, llevándolo a destino.
Por ahora, están probandolo en Arizona.
Su gran rival en el campo de los vehículos autónomos, Waymo, también ya está usando camiones autónomos para cargas reales, y Google ha decidido colaborar con ellos, convirtiéndose en la primera compañía que usa este servicio de Waymo para distribuir mercancía. Estos camiones usan los mismos sensores y software que los coches autónomos, lo que ha supuesto un ahorro importante en los costes.
Tras unas pruebas iniciales con resultados muy buenos, Google ya está usando camiones autónomos para su centro de datos en Atlanta, ciudad considerada como uno de los principales centros logísticos de EEUU.
Este servicio “en real” permitirá a la IA de Waymo aprender, teniendo la seguridad de que si algo va mal, un conductor experto tomará el control (en todos los camiones irá uno).
Tesla, por su parte, ya ha creado su propio camión autónomo, el Tesla Semi Heavy Duty, que ya está utilizando para llevar paquetes de baterías desde la Gigafactory, en las montañas de Nevada, a la fábrica de automóviles en California.
Se estima que el camión con autonomía de 500 millas cueste $180,000 dólares, mientras que un modelo con una autonomía de 300 millas tendrá un precio de partida de $150,000. Además, habrá una edición limitada de la “Founders Series” (sólo se harán 1000 ejemplares), con un precio de partida que rondará los $200,000 dólares.
Espero que os haya parecido interesante. Nos vemos en el siguiente post.