El clima laboral que mejora resultados
El clima laboral resulta determinante en los resultados. Las organizaciones y sus líderes lo saben, aunque, lo que muchos desconocen son los signos externos de que las cosas se están haciendo bien. Un clima laboral positivo:
- Mejora la productividad: al aumentar los niveles de motivación del empleado, que influyen directamente en los de rendimiento, que, por el contrario, decaen si éste no se siente valorado o si se difumina el vínculo que le une a la organización.
- Consigue retener el talento: un empleado satisfecho es un empleado fiel, el caso contrario es el que conduce al abandono y a pone a la empresa en la complicada (y costosa) situación de encontrar un sustituto, dando comienzo a un nuevo proceso de reclutamiento, con todo lo que ello implica.
- Mejora su imagen: no sólo por el clima de satisfacción laboral sino por los efectos que ésta tiene en clientes y proveedores, en su relación con los diferentes miembros de la organización.
Cómo reconocer el buen clima laboral
Un clima laboral positivo es:
A/ Transparente: la comunicación es fluida, bidireccional y cada persona puede expresarse libremente. Nadie tiene miedo a sugerir una nueva idea o plantear una mejora.
B/ Equilibrado: la conciliación de la vida familiar y profesional no se entiende como una recompensa o como algo impensable, sino que se ve como un derecho plenamente disfrutado.
C/ Centrado en el desarrollo: el crecimiento individual de los empleados es la llave para una adecuada gestión del cambio.
D/ Donde prevalece el sentimiento de equipo: la sensación de unidad y de pertenencia a la organización culmina cuando el empelado no siente que trabaja para otro sino que actúa como si lo hiciera para sí mismo.
7 pasos hacia un mejor clima laboral
No todas las organizaciones disfrutan de un clima laboral como el descrito. No obstante, siguiendo siete sencillos pasos, pueden acercarse a su ideal:
1. Flexibilidad: tanto en los horarios de trabajo como en la posibilidad de trabajar de forma remota.
2. Comunicación: utilizando todos los medios disponibles para fomentar la calidad de la información y su accesibilidad y lograr estrechar las relaciones laborales mediante flujos comunicacionales más abiertos.
3. Reconocimiento: el empleado se debe sentir valorado y existen muchas clases de incentivos, económicos y no económicos que logran mejorar de esta forma el clima laboral.
4. Desarrollo personal: el crecimiento individual del empelado, no sólo le hace reforzar su vínculo con la organización, sino que constituye además el mejor plan estratégico de futuro para el negocio.
5. Confianza: transparencia, claridad, justicia y honestidad son esenciales para construir confianza entre las personas que trabajan juntas.
6. Retroalimentación: el feedback es la forma más útil para conocer el estado del clima laboral y, no sólo eso, sino que también ayuda a identificar todas las áreas susceptibles de mejora.
7. Propósito: tener una meta clara, una visión es, muchas veces, la mejor motivación. Este elemento ayuda a cada persona a entender cuál es su aportación al fin común, por lo que contribuye a eliminar tensiones, evitar malentendidos y mejorar el clima laboral.