Director de Operaciones: sus funciones esenciales
Este perfil profesional, enmarcado dentro de los puestos de alta dirección, desempeña un papel esencial dentro de las empresas. Dependiendo de la compañía y del tipo de negocio, las funciones del Director de Operaciones pueden variar, pero de manera muy general podemos afirmar que su principal responsabilidad es apoyar el CEO en gestiones estratégicas y velar porque todos los procesos empresariales se lleven a cabo de un modo eficaz y rentable.
También conocido como Chief Operating Officer o COO, su labor ha evolucionado mucho durante las últimas décadas. Anteriormente, un Director de Operaciones se limitaba a supervisar los procesos de producción, en busca de métodos eficaces que aumentaran la productividad empresarial.
Si bien es cierto que este objetivo sigue entrando dentro de sus funciones, actualmente ya es un perfil profesional mucho más amplio que engloba muchas responsabilidades añadidas. En realidad, la meta final de este responsable es que la cosas sucedan: convertir los planes operacionales en una realidad.
Perfil y habilidades de un Director de Operaciones
Esta figura es clave como enlace entre los diferentes departamentos de la compañía. De hecho, en muchas circunstancias es el eje que permite que la gestión empresarial siga adelante de un modo eficaz y coordinado.
Un Director de Operaciones debe tener un perfil orientado fundamentalmente a la obtención de resultados. Finanzas, Logística y Recursos Humanos son tres áreas en las que este profesional debe estar presente, y si alguna de ellas no cumple con su cometido, será el COO quien deberá aplicar las medidas necesarias para solucionar los errores.
Transformar una idea en resultados económicos satisfactorios es otro de los principales objetivos del Chief Operating Officer. Por ello, entre sus habilidades deberá destacar una capacidad de análisis global avanzada: saber entender la relación entre los resultados de las diferentes áreas de la compañía y tratar esta información como un todo.
El liderazgo es otra de las capacidades esenciales de un Director de Operaciones. Puesto que una de sus funciones es la de gestionar equipos, unas buenas dotes de comunicación son imprescindibles para el desarrollo de labores diarias.
Estas habilidades solo son algunas de las que debe aplicar un COO en sus responsabilidades, por lo que se trata de un perfil muy amplio que deberá estar formado en varias áreas de la empresa. Además de la formación académica, que podrá adquirir a través de algún Máster en Dirección Estratégica de Operaciones e Innovación, es importantísimo que conozca a fondo cada uno de los departamentos de la empresa y a su personal.
Las principales funciones de un Director de Operaciones
Las principales áreas donde este ejecutivo llevará a cabo sus labores son las de Finanzas, Logística y Recursos Humanos. Al ser un puesto tan versátil, en ocasiones sus funciones no están delimitadas de un modo muy claro, pero a modo de resumen, podemos afirmar que estas son sus responsabilidades más importantes:
- Supervisar el cumplimiento de los objetivos de gastos y ganancias.
- Gestionar la adquisición de materiales y revisar que cada proyecto disponga de los equipos necesarios.
- Velar por que haya un clima laboral óptimo y por el bienestar de los trabajadores para conseguir que se optimicen los procesos y aumenten los resultados.
- Gestionar los recursos económicos y operacionales para potenciar al máximo el rendimiento a las empresas.
- Facilitar la comunicación entre departamentos, empresas y clientes.
- Planificar las actividades empresariales mediante un plan de trabajo diseñado conjuntamente con todas las unidades de negocio.
Todas estas funciones exigen del Director de Operaciones una amplia serie de conocimientos para hacer frente a los retos diarios y decisiones que marcarán el rumbo del desarrollo del negocio. Deberá traducir los objetivos de la compañía en acciones concretas que permitan su consolidación en el mercado.