Nuestro involucramiento con la tecnología es un factor de medición de nuestra edad
Nos hablan de tecnología y dependiendo de nuestra edad, el baldado de agua nos cae distinto. La cierto es que al final del día debemos estar acostumbrados a “los cambios”, los cuales son constantes. Los que ya usamos Facebook debemos ser conscientes que todos los días hay cambios, mejoras sobre la plataforma, las cuales muchas veces son imperceptibles pero es evidente que permanentemente se dan. Los software actualmente son SaaS “software as a Services”, lo que implica que este servicio en la nube esté en constante mutación y a disposición de todos.
Los que estamos en generaciones pasadas, queremos “la seguridad” en nuestra zona de confort, y la realidad es que estamos expuestos y convivimos con distintas generaciones y aprendemos de todas. En tal sentido, nuestra adaptación a las mutaciones de la tecnología nos permitirá avanzar con ella y es importante que lo hagamos, ya que de igual forma con nosotros o sin nosotros este avance se dará. Es impresionante cuando uno de adulto recorre universidades y parece retroceder en el tiempo recordando el paso por las aulas. La realidad es que, es algo totalmente distinto, uno entra a la universidad y ve chicos “todos con celulares” conectándose, interactuando física y virtualmente con sus compañeros, profesores o familiares. La educación también cambió a los profesores, que han tenido que adaptarse a las nuevas formas en las que sus alumnos han traído y deben estar conectados para poder dar respuestas claras y a la altura de los requerimientos. Queda ya por parte de cada uno adaptarse, aprender a desaprender y aprender nuevamente. Si nos preguntas tienes Twitter o Instagram y la respuesta es “no”, pues ya sabemos que estás por encima de los 50, así como si le preguntamos a los chicos: ¿alguna vez has utilizado un teléfono de dial?, la respuesta será “no” es que tienes apenas 20 años, en estas cosas básicas vamos conociendo nuestra realidad, nuestra historia y nuestra capacidad de amoldarnos a los cambios.
Si me subo a la ola de la tecnología, ¿en qué me podría ayudar? ¿en tú trabajo?, ¿en la comunicación con tus hijos?, ¿en el relacionamiento diario?, ¿consideras que sí va a servir?
Carmen Montenegro, Embajadora Digital
Club Alumni OBS Perú